Hace una semana, el pasado 24 de marzo, la policía acudió al CIE de Zapadores en Valencia para llevarse a Mohamed Benhalima. Los dos procesos que había pendientes y de los que dependía su entrega a Argelia habían sido resueltos de urgencia: las alegaciones contra el expediente sancionador que tenía abierto, y su proceso de protección internacional. Tras notificárselo, los agentes le trasladaron al aeropuerto, y en poco tiempo ya estaba volando hacia Argel. Una semana después ni sus abogados ni su familia han conseguido hablar con él. La única señal de vida: un vídeo autoculpabilizador que retransmitieron varias emisoras del país el domingo 27 de marzo, algo que levantó sospechas de que el activista habría sido, como temía, torturado.
Hoy se ha publicado un artículo en El Salto dando voz a distintas personas y organizaciones, preocupadas por el estado de salud de Banhalima. Entre ellos, aparece nuestro compañero Alejandro Gámez.
Una semana sin noticias de Benhalima, el activista del Hirak que España entregó a Argelia https://t.co/rMjcAJaEPg vía @elsaltodiario
— Red Jurídica Abogados/as (@laredjuridica) April 1, 2022
En 2020 el gobierno argelino publicó una instrucción en la que afirmaba que iban a ser detenidos algunos activistas que habían denunciado casos de corrupción en el seno del ejército. Nuestro compañero Alejandro Gámez recuerda cómo, en agosto de 2021, otro activista “fue a comisaría a notificar el cambio de domicilio, que es una obligación cuando eres solicitante de asilo, y en ese momento lo detuvieron. Menos de 10 días después estaba deportado en Argelia”. Ante esta situación, tras ser llamado tres días después de la detención de su amigo por la policía, Benhalima partió a Francia donde solicitó de nuevo asilo, y allí en aplicación del protocolo de Dublín —que obliga a pedir asilo en el primer país comunitario de llegada— le dijeron que debía volver a España, una vez en el país fue detenido el pasado 14 de marzo. Las cartas para él ya estaban echadas. “En el momento de la detención se le abrió un expediente administrativo sancionador por infracción a la Ley de Extranjería, por suponer un peligro para la seguridad nacional española o para las relaciones de España con terceros países”, detalla Gámez.
El artículo completo se puede leer aquí
Haciendo click aquí puedes leer un comunicado, en inglés, suscrito por distintas organizaciones (entre ellas Red Jurídica) condenando la entrega de Benhalima a Argelia
[…] nuestro blog (Nulidad de Actuaciones) del periódico Público un artículo sobre la situación de Mohamed Benhalima, un activista y disidente argelino que ha sido deportado por las autoridades españolas pese al […]